En Venezuela, la batalla por la democracia también se lidió en las plataformas digitales y redes sociales. Los ciudadanos enfrentaron acciones de bloqueo en contra de espacios críticos al gobierno.
La organización Venezuela Inteligente, a través de su proyecto VESINFILTRO, registró un impedimiento de acceso a 61 medios de comunicación en el contexto de las elecciones. Es decir, cerrojos para que la población no pueda ingresar a través de los principales proveedores de Internet.
Su informe, publicado el 1 de agosto, da cuenta de que se afectó a 86 dominios (direcciones de páginas web) “sumando un total de 431 eventos de bloqueos activos”. Además, los portales digitales de nueve organizaciones y proyectos de DD.HH. también fueron censuradas, registrándose 41 eventos de bloqueos activos.
Un día antes de los comicios, que se desarrollaron el 28 de julio pasado, incluso se impidió el acceso a las páginas de wikipedia.org y es.wikipediaorg “en un intento por impedir la carga de actualizaciones”. Ese portal suele ser relevante porque cuando una persona busca en Google referencias de las elecciones en Venezuela, es de los primeros en aparecer en la lista de resultados y, por tanto, más visitado por quienes quieren hacerse una idea de lo que ocurrió en ese país.
La oposición, por su parte, consciente de la política de restricción de Nicolás Maduro, logró estructurar 50 000 comanditos a escala nacional. Cada uno integrado con un promedio de diez personas. Estas estructuras tenían como fin llevar a cada rincón del territorio las acciones y mensajes de la campaña electoral de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD). Sin embargo, también se convirtieron en un ejército comunitario digital.
A través de grupos, principalmente de WhatsApp, facilitaron la difusión masiva y rápida de mensajes, instrucciones, alertas y lineas estratégicas al punto de convertirse en medios de información en las horas más intensas de los comicios presidenciales.
La aplicación de mensajería instantánea WhatsApp es la más usada, con un 79% de frecuencia, en Venezuela. En marzo de 2023, la firma More Consulting presentó un estudio donde, además, dio cuenta que el 62% de las 1500 personas encuestadas aseguró que usa con más frecuencia los medios digitales para enterarse de asuntos políticos.
Quienes usan con más frecuencia los medios tradicionales llegaron apenas al 29,8% y el restante no supo responder o no contestó. Adicionalmente, hubo un conglomerado de espacios independientes periodisticos dedicados a verificar el contenido que circuló en la esfera digital. Por ejemplo, Cotejo, Cocuyo Chequea, Cazadores de Fake News, EsPaja y el Observatorio Venezolano de Fake News. Su labor permitió que los bulos y la desinformación sean contenidos.
En el campo digital, la oposición logró una ventaja digital fundamental, cuando María Corina Machado difundió pocas horas después de que se cierren los centros electorales el portal donde se encontraban las actas recabadas por su movimiento.
Ahí, se mostraron las evidencias que daban como ganador de la presidencia del país vecino a Edmundo González con una amplia distancia. Esto ratificó la importancia del Big Data para la transparencia y la gestión política electoral.
Mientras Maduro se defendía con retórica (y la proclamación del organismo electoral sin evidencias), la oposición mostraba datos que no solo le dieron legitimidad, sino que activaron a los actores de la comunidad internacional y alentaron la esperanza de un cambio entre los ciudadanos que se volcaron a las calles.
Sin embargo, VESINFILTRO alertó que poco tiempo después los principales proveedores de Internet bloquearon, “con múltiples técnicas, al menos tres páginas web en las que el comando opositor Con Vzla anunció que publicaría las actas de sus testigos con los resultados por mesa de votación: resultadospresidencialesvenezuela2024.com, ganovzla.com y resultadosconvzla.com”.
Tanto Wikipedia, como varios medios digitales lograron sortear los bloqueos. De igual manera se logró mantener activa la página con las actas de la oposición, logrando así una victoria digital en medio de una batalla por la democracia que aún continúa en Venezuela.
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